2008/03/31

2 cubos

cubo verde y cubo azul con pala amarilla bajo un sol naranja y una nube negra en un cielo azul y sobre un suelo marrón

2008/03/16

Programación

Curso CS61B de Primavera 2007 en UCBerkeley, en formato podcast.

[...] me gusta pensar que lo que os estoy enseñando es programación.

Hay gente que dice "la informática no es sólo programación", esta gente es... estos idiotas son gente que no sabe lo que es programación. Dicen "no también hay Análisis" que para mi es programación, "también hay Algoritmos" que para mi es programación, "también hay esto y lo otro... Consideraciones de la Interfaz de Usuario" que para mi es programación.

Esta gente tiene una visión muy estrecha de lo que es programación: la mía es mucho más amplia. [N. del T.: no entiendo bien lo que dice aquí] y lo que intentamos hacer en cualquier curso universitario es enseñaros conceptos. No somos un instituto de formación profesional [N. del T.: trade school equivale aproximadamente a la FP española] [...]

-- Paul Hilfinger

2008/03/11

Confianza

El ser humano es deliciosamente irracional en cuanto a confiar/desconfiar se refiere.

Por un lado están las religiones.

Alguien te dice que tienes que creer en algo que no puedes demostrar que exista ni demostrar que no exista. La única salida es confiar o no confiar en el mensajero.

Y es un hecho que hay mucha gente que confía a pesar de que es un hecho que, históricamente (y en los periódicos al menos un par de veces al año [atentados en nombre de un dios, tocamientos en nombre de otro, etc...]), la gente detrás de la religion (de cualquiera de ellas) son gente de la que no te puedes fiar.

Ahora iba a dar un salto mortal hacia atrás con voltereta y triple tirabuzón invertido para hablar de la confianza en el software libre frente a la confianza en el software cautivo (propietario, o como quieras llamarlo), pero dándome cuenta que escribo con un sistema operativo que no es software libre, y en un sistema de blogging que tampoco lo és, pierde uno toda autoridad moral para escribir sobre el tema.

Lo que no querría dejar de apuntar es la peripecia de Dustin Brooks que publica Jeff Atwood en su blog. Resumo para no alargar y para los que no dominen el inglés:

Dustin quería hacer una copia de su correo de GMail, encontró una aplicación que no le servía por los pelos, y mirando el código de casualidad (con una herramienta que te permite ver el código aunque no esté publicado), Dustin descubrió que sus datos (y los de otros 1777 incautos usuarios del programa) estaban siendo recolectados por un desaprensivo programador spammer.

En fin, creo que sólo puedo añadir: Fíate de quien tu quieras, pero por lo menos se consciente de quien te está dando garantías para que te fíes y quien no.

2008/03/04

2008/03/01

Rompiendo la baraja de la información

El juego del ultimátum

Leo en Ecos del futuro sobre el juego del ultimátum:

Se tienen 2 sujetos separados. A uno de ellos se le muestra una cantidad de dinero, y se le pide que haga 2 pedazos. El segundo tiene que decidir si acepta la división o si la rechaza. Si el 2º acepta ambos se quedan con sus respectivas partes, si la rechaza no hay dinero para ninguno.

El resultado es que cuando la división no era descaradamente desproporcionada (algo más pareja que el 80-20) el 2º sujeto aceptaba, pero cuando la división era muy desproporcionada (80-20 o más), el 2º sujeto rechazaba el trato.

Pensado fríamente, ¿no debería el 2º aceptar siempre?, ¿acaso no es mejor tener 20 que tener 0?.

Infoxicación: Sobredosis de información

Luego en el artículo Cortina de humo de Capire.info, Luiz Agner nos recuerda que de toda la información disponible, apenas somos capaces de alcanzar, asimilar, y utilizar una pequeña parte.

Cito directamente el artículo:

Una edición dominical de O Globo o O Estado de Sao Paulo contiene normalmente más información de lo que el común de los mortales podría recibir durante toda su vida en la Edad Media. Los medios de comunicación de masa y la Internet expelen volúmenes cada vez mayores, de datos y de noticias a velocidades impresionantes: Somos masacrados por información, en cantidades imposibles de ser procesadas. Encontrar lo que es pertinente o necesario, en este contexto, pasó a ser una tarea ardua para los ciudadanos comunes.

Si en el pasado, se acostumbraba a pasar la información por las manos de bibliotecarios, periodistas, educadores o fuentes con reconocida credibilidad, actualmente, gran parte de ella es imprecisa y de dudosa calidad. En los medios de comunicación masivos, por ejemplo, se mezcla la cantidad con la baja calidad, sin provecho concreto para el ciudadano en términos de conocimiento construido, y cuanto más intentamos acompañar esta carrera, más somos vulnerables a los errores de la percepción.

La crisis contemporánea es justamente la de cómo transformar la información disponible en conocimiento. Más información debiera representar más oportunidades para aumentar nuestra comprensión del mundo, pero esto no ocurre en la práctica. La explosión de información funciona como una cortina de humo. Surge un síndrome emocional y mental que lleva a las personas a conclusiones erróneas y a decisiones ingenuas, causando ineficiencia y perjuicios financieros para las organizaciones-problema típico de los trabajadores del conocimiento. En términos de salud individual, los efectos del exceso de información pasan por estrés, tensión, trastornos del sueño, problemas digestivos, dificultades de memoria, irritabilidad y sentimiento de abandono.

Idiocracia

Y acabo mezclando estas dos ideas con la recientemente vista película "Idiocracia". Una distopía donde los ininteligentes han tenido más éxito evolutivo que los inteligentes, ya que las sociedades actuales están basadas principalmente en la defensa del débil o del menos capaz frente al hecho evolutivo que no es que premie al fuerte, sino que más bien reduce las posibilidades del menos capaz.

El camino mental sería el siguiente:

Si de toda la información que se genera en la red (o fuera de ella) apenas somos capaces de procesar/asimilar/aprovechar menos del 20%... ¿no habría gente rompiendo la baraja como en el juego del ultimátum?, ¿no daría esto lugar a gente que se desentiende del conocimiento por que no puede abarcarlo todo, y decide mantenerse ignorante?. Que miedo da el futuro, ¿eh? ó_ò